Este título perturbo a más de un alma, de inmediato pensaron que soltaría todo en un arranque de histeria navideña, combinada con las crisis de fin de año… ¡pues NO!
¡Y
siii! hay gente que hace crisis en el fin de año, cuando empieza a revisar todo
lo que no logró, siempre es más fácil criticarnos, somos pésimos para colgarnos
nuestras propias medallas, celebrar la
pequeña victoria del día.
Es
parte de la miseria humana –auto castigarnos.
Este
año escribí poco y no ha sido falta de inspiración, todo lo contrario, a pocas
horas de despedir el 2022 puedo decir que literalmente el tiempo voló, y cuando
me quería referir a una situación, llegaba la otra como una avalancha
abrumadora, voy a tener que hacerme un tik-tok a escondidas de mis alumnos,
para poder ir a la vanguardia.
Confieso
que este año me ha transformado en muchas áreas de la vida, me ha confrontado y
me ha enseñado, sin caer en el cliché… quién si, quién no y quién nunca más.
En
términos de amistad, entendí al fin eso que dicen, que con los años el circulo se hace más
estrecho y estoy muy feliz de quienes permanecen… no nos vemos siempre, pero
saben que doy mi vida por su felicidad.
En
términos laborales puedo confesar que me siento muy alegre de la oportunidad de
trabajar en la carrera que yo elegí, tengo mayores aspiraciones, pero también tengo
la tranquilidad y la satisfacción de siempre dar lo mejor de mí, de tener
buenos colegas y excelentes mentores, Casilda y Regina han sido grandes luces
en mi camino.
También
he aprendido, a quién nunca parecerme profesionalmente.
Mi
familia no es perfecta, esa era mi tía y ya murió… somos una familia con luces
y sombras, como todas, con muchas cosas por asumir y más aún por las que DAR
GRACIAS, encuentra lo bueno en la tuya.
El
amor, el dinero y la salud son capítulos al margen… necesitaremos algo más
fuerte que el café para esa conversación.
En
mi vida espiritual, aunque no milito en
ninguna congregación, siempre tengo la oportunidad de expresar mi fe y desde ahí
hago mi parte, pero sin duda entiendo que más que Salud Mental, la gente
necesita algo en que creer para reconstruirse y encaminarse cada día.
En
algunas confesiones muy intimas, debo decir que este año me JARTEEE de mucha
gente, esa vaina de que;
Fulanito
me dijo- dígale que si- que no andamos
ni en usted, ni en fulano.
Yo
no hablo mal de nadie, siempre me he caracterizado por ser espontanea, con los
años he aprendido un poco a ser oportuna… si no te gusta que cuente lo que me
hiciste… porque eso te hace quedar mal, no es mi bussiness more.
Renuncio
a cargar con el peso de los demás, sus miedos y creencias limitantes, la forma
en que te lastiman y luego te quieren hacer responsable… NO SOY TU MALDITO ZAFACÓN MORE.
La
mayoría de la gente que nos hirió este año, ni si quiera les importa, ¿por qué
cargar con eso?
Estas
confesiones poco ortodoxas hablan un poco de la persona que soy, ni buena ni mala, alguien diferente, es un
asunto de coraje… de tomar el riesgo de ser uno mismo y esa es solo mi
responsabilidad.
La
vida es tan corta, y el oficio de vivir tan difícil, que cuando uno empieza a
entenderlo, ya hay que morirse.
Así
que vive tu vida, con luces y sombras, porque desde afuera muchos la envidian,
encuentra tu lo bueno, que los demás ven.
No
te rodees de personas que no tienen la capacidad de verte brillar, de ser
exitoso… no lo saben manejar y querrán que seas igual de miserables que ellos.
Cuídate
más de la oveja dentro del corral, que el lobo que te asecha. Ahora los judas no se
arrepienten, si te descuidas se vuelven a sentar en tu mesa.
Nunca
te quedes donde no te quieren… mereces lo mejor, que nadie te convenza de lo
contrario.
Recuerda
que el árbol genealógico también se poda.
Viniste
a ser feliz y plen@... Que nada te distraiga de lo contrario.
FELIZ
AÑO NUEVO… HASTA LA OTRA.